El Gobierno empieza a «desmontar» la reforma laboral con la derogación de un artículo avalado por el TC
La ministra portavoz ha anunciado que el compromiso del Gobierno es convocar la mesa de negociación con la Generalitat antes de acabar febrero aunque reconoce que "no esperamos frutos".
«Venimos de derogar, por fin, el artículo 55D» exclamaba este martes la ministra de Trabajo Yolanda Díaz. El Gobierno se felicita así por haber empezado a derogar la reforma laboral del Partido Popular. La ministra celebra que «vamos desmontando» la norma impulsada por el Gobierno de Mariano Rajoy. Por la vía de urgencia de un Real Decreto Ley, que entrará en vigor este miércoles, Díaz asegura que el objetivo de la derogación es «dar seguridad» a los trabajadores.
Para el Ejecutivo, la derogación de este artículo, avalado por el Tribunal Constitucional, debe servir para «reparar los derechos de los trabajadores y trabajadoras, que hoy pueden sentirse tranquilos, ya que a nadie se le puede despedir sin una causa justificada». Según Díaz ese apartado de la reforma laboral era «una anomalía en relación con los países de nuestro entorno».
Nuevos impuestos digitales
Por su parte la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha justificado los dos nuevos impuestos digitales que este martes ha aprobado el Gobierno «para no subir los impuestos a la clase media y trabajadora». Montero dice que «los datos demuestran que se puede reducir la deuda y fortalecer el Estado de bienestar». En este sentido recuerda que «no podemos pretender tener un estado del bienestar moderno si nuestro modelo tributario es caduco».
La también portavoz del Ejecutivo apuesta «por qué los que más tienen más aporten». Asegura que «si la sociedad y la tecnología evoluciona, ofreciendo nuevas oportunidades de negocio, es justo que la fiscalidad se mueva en esta dirección» para «evitar que se provoquen competencias desleales». Dice que el sistema actual «está perjudicando que otros sectores se muevan en entornos no tan ajustados».
Según la ministra de Hacienda, con estos dos nuevos impuestos, «España moderniza el sistema fiscal haciéndolo más justo y redistributivo». El Gobierno defiende que continuará reivindicando «un acuerdo global» sobre el impuesto digital. De momento, este año, la recaudación que se prevé de 980 millones adicionales no se ejecutará hasta como mínimo el 20 de diciembre. Así lo ha decidido el ejecutivo que se da diez meses de plazo para alcanzar un acuerdo internacional.
«Compromiso» con la mesa
Montero ha asegurado que «el compromiso sigue siendo convocar la mesa de diálogo antes de acabar el mes de febrero». Montero, por eso, reconoce que «el Gobierno no espera frutos a corto plazo» del encuentro qué Pedro Sánchez tiene previsto convocar en los próximos días y al que asistirá también Quim Torra así como otros miembros de la Generalitat. La fecha, por ahora, continua siendo un secreto.